DESMANES DEL PODER

29-04-2010 23:45 - César Giménez

Las vidas y la educación de muchas pequeñas criaturas con diversidad funcional están en manos de patanes sin entrañas que, con bostezos somnolientos, juegan perezosamente a pasarse la bola de fútil oficina de administración a sobrante administración a centro llamado escolar y vuelta a empezar trámites de una excesiva 'burrocracia' en la que siempre, siempre, marean a los padres hasta más allá de lo imaginable para destrozarlos anímicamente y finalmente rematarlos en su agotador viaje sin destino, segregando a sus hijos en este sistema supuestamente educativo que nos toca padecer.

Duele decir que nos rodean una serie de viles pilatos cuya mayor virtud es que les huelen razonablemente bien las manos lavadas con jabón Lagarto del bueno, de El Corte Inglés por lo menos, que bien disimula el hedor insoportable de sus podridos y miopes corazones. El bocata completo lleva rodajas generosas de sufrimiento, rabia e impotencia para los progenitores y lonchas de padecimiento, alienación y confusión para la progenie, 'pagana' en cualquier ocasión propicia. Sangría de pequeños a los que excluyen con palabras técnicas pero con faltas de ortografía quienes deben velar por su bienestar desde su más tierna edad.

Auténtica locura de niños y niñas a centenares desescolarizados ante el peligro inminente de una 'educación' espartana que con total seguridad les moldea para ser carne de cañón de instituciones desde ya. Duele admitir que sobrevuelan nuestras cabezas unos malvados que, sí o sí, pagamos entre todos y a quienes otorgamos sin darnos cuenta poder sobre el destino de muchos. Abundan casos invisibles y repugnantes como los de Silvia o Jesús, y tantos otros incontables repartidos por nuestra apocada piel de toro; tropelías cometidas contra muchos con resultado de sudores fríos y lágrimas llenas de ansia y desesperación. Ignoro los litros de sangre vertidos a costa de frases frías como el hielo donde el Ministerio de Educación admite sin caérsele la cara de simulado pudor que no tiene poder ejecutivo (es incompetente) frente a las autonomías porque las competencias pertenecen a las taifas; se ven las desvergonzadas vergüenzas a la secretaría de Estado de Educación y Formación Profesional, comandada sin timón y sin rumbo por una tal Rosa Peñalver, condescendiente y pusilánime que tampoco actúa de oficio contra quien desea amedrentar con un mal farol a los padres de un niño que no va al jardín corrupto de infancia por, entre otras causas, no tener tres años todavía, ¿y? Casos que pasan impunes, sin inspección escolar que demuestre que ella y las escuelas cumplen con su deber.

Aquí todo parece depender 'de arriba', excepto lo que depende 'de abajo' y así el cuento de nunca acabar. El único problema estriba en que el tiempo vuela y los actuales críos crecen y antes de darse uno cuenta miden dos metros y se han convertido en otro desahuciado adulto. Objetivo cumplido.

Fuente:Y Málaga